Una invitación de Cruises Only...

El nuevo y lujoso MARINA de Oceania Cruises, es el barco de cruceros seleccionado para este "Seminar at Sea" de Oceania Cruises y Cruises Only, durante la primera semana de su travesía alrededor de la Península Ibérica, partiendo de Barcelona y terminando en Bilbao, tocando también los puertos españoles de Valencia, Málaga y Cádiz, así como Casablanca en Marruecos y Lisboa en Portugal.
Una semana de conocimiento, diversión y nuevas impresiones, que quedará reflejado en esta bitácora entre el 26 de mayo y 02 de junio de 2011.


lunes, mayo 30

Cádiz, llegada y visita a pie


Cuando son las 8 de la mañana y con un día que pronostica buen sol con posibilidad de lluvia por la tarde, nuestro MARINA ya se encuentra atracado en el puerto de la ciudad andaluza de Cádiz. Les confieso que hasta ayer durante la cena no estaba claro el panorama de hoy donde estaba la posibilidad de viajar una hora y treinta por tren o bus, igual de regreso, a la fabulosa ciudad de Sevilla, o quedarnos a conocer Cádiz que hasta los momentos no presentaba mucha motivación, pero considerando que debemos estar a bordo de nuevo a las 4:30 de la tarde, nos pareció a la mayoría que mejor nos quedamos a conocer quien en latín se conociera como GADES, incluso convencimos a Dante que pensaba ir a Sevilla a pasar el día con sus tías, a que ellas bajasen a Cádiz, motivo por el cual no salió con nosotros hoy, al igual que Carlos que anduvo por sus cuenta aunque nos encontramos con cierta frecuencia en el paseo.

Bajamos a caminar sin mucha información más que un mapa de la zona que recomienda, y están marcadas con una línea de color en el piso, las cuatro vías del recorrido a pie de Cádiz.
Bajamos juntos Helena, Karla y Fernando, Alicia y yo,  comenzando nuestro recorrido por el Paseo de Canalejas por la avenida del puerto, para subir después hacia la Plaza de San Juan de Dios por la estrecha y pintoresca calle Aurelia Sellé. Esta plaza casi peatonal fue en el pasado mercado y hasta plaza de toros, ha cambiado varias veces de nombre y pasado muchas calamidades hasta llegar a la hermosa plaza de hoy en terreno ganado al mar y con sus emblemáticos edificios, la Iglesia de del hospital de San Juan de Dios, catedral en tiempos antiguos, y el Ayuntamiento. Con grandes restaurantes y bares con terrazas al aire libre parece ser uno de los lugares predilectos de gaditanos  y turistas.

Siguiendo entre pintorescas calles con tiendas de abastos y de mercancía fina, ropa, zapatos, etc,  como la calle Pelota y Marqués de Cáceres del barrio “del Pópulo” y pasando por su legendario arco, llegamos a la plaza de la Catedral de Cádiz donde esperamos a Rosianne y Paola que bajaron un poco más tarde de barco. Hermosos edificios de 4 pisos la mayoría, coloridos y bien cuidados con abundantes flores de la época, hacen el paseo más agradable. Una corta visita a la Catedral, También llamada Santa Cruz sobre el Mar aunque los gaditanos la denominan Catedral Nueva en contraposición a la Catedral Vieja o  Catedral de la Santa Cruz, fue  mandada a construir por Alfonso X El Sabio y es la  sede episcopal de la diócesis de Cádiz. Su construcción duró desde 1722 hasta el  28 de noviembre de 1838.
Su interior es de una  planta de cruz latina y tres naves, quedando delimitado el espacio por conjuntos de columnas. El altar mayor consiste en un templete de estilo neoclásico dedicado a la Inmaculada Concepción. En todo el perímetro del templo se observan capillas, siendo dos  de ellas dedicadas a los patronos de la ciudad San Servando y San Germán.

Saliendo de la catedral cruzamos hacia la izquierda vía al malecón para tener hermosas vistas del mar y de la Catedral por detrás con mejor visión del mirador de la Torre de Poniente. En este punto nos encontramos con Carlos que con la velocidad que apareció, se desapareció. Hora de incertidumbre al comenzar a tomar conciencia  de lo grande de la ciudad y de las 4 rutas a caminar, así que fuimos cambiando de una a otra tratando de ver los más posible y tener una buena idea de esta hermosa ciudad que hace que no tengamos ningún sentimiento por no haber ido  a Sevilla. Karla, con ansias de compras de la gastronomía local, hace que Fernando busque en el mapa la vía más directa al “Mercado Central de Abastos” y siguiendo entre una calle más hermosa que otra y pasar por la bonita Plaza de Flores con su imponente edificio de de la oficina de correos, hicimos un toque técnico en un muy limpio y agradable mercado municipal, recientemente reconstruido y bien surtido como verán en las fotos, aunque con algunos negocios cerrados por ser lunes.
La Plaza de abastos o Mercado central de abastos de Cádiz fue proyectado por Torcuato Benjumeda como un cuadrilátero neoclásico a modo de plaza porticada dórica por el año 1830, situado sobre un terreno donde estaba  la granja del convento de los Descalzos, hoy Plaza de la Libertad al lado de la Plaza de las Flores. En el año 1928 el arquitecto sevillano Juan Talavera y Heredia llevó a cabo la transformación de la plaza de abastos, 1928, y donde todos probamos algo, frutas, salchichón y aceitunas.

 Continuamos por la calle frente a la entrada principal del mercado, que lleva el nombre de nuestra siguiente parada, el Hospital de Mujeres, del siglo XVII y clásico estilo barroco,  continuando por la calle Rosario Cepeda y subir por Sacramento hasta el edificio emblemático de la ciudad por ser quien tiene el observador de barcos más alto de Cádiz, la Torre TAVIRA, recordando que esta ciudad de extraordinaria importancia con el descubrimiento de América, la mayoría de las casa burguesas de la época construían altas torres de observación en sus tejados para poder observar en la distancia los barcos que venían del nuevo continente cargado de tesoros.

 Cádiz es mundialmente famosa por sus 126 torres miradores, testigos del comercio y prosperidad de que disfrutó la ciudad en el siglo XVIII, siendo la Torre Tavira designada torre vigía oficial del puerto de Cádiz por ser la cota más alta de la ciudad, encontrándose en el casco antiguo a 45 metros sobre el nivel del mar. Don Antonio Tavira era el vigía de la torre.

Siguiendo dentro del centro de la ciudad ahora comenzamos a bajar por la calle San Miguel pasando por la Biblioteca Municipal cuyo aviso estaban reparando y al igual que otros edificios del centro tanto públicos como privados pudimos observar que se encuentran en total recuperación manteniendo una imagen de limpieza y orden que hace de la ciudad un espacio muy agradable para caminar.

Por esta vía llegamos hasta la popular Calle ANCHA, centro de la ciudad desde el siglo XVII,  y de veras que es ancha, llena de comercios, bares y restaurantes, cerrada al tránsito automotor hace que se vea como un gran boulevard desde la Iglesia de San Pablo (Iglesia de la Conversión de San Pablo), templo del siglo XVII,  hasta la plaza e iglesia de San Antonio. Ancha, corta, pero larga en tiempo para recorrer por la gran cantidad de tiendas que debemos suponer que había que “conocer”, brillante sol con clima caluroso pero fresco a la sombra, hermoso portales de las casas y edificios con espectaculares paredes de azulejos y amplios y soleados patios interiores, cafés al aire, flores en los balcones y caminando poco a poco llegamos hasta la pintoresca plaza de San Antonio, con el casino de la ciudad y por supuesto la gran Iglesia de San Antonio, el popular “busca novios”, por lo cual la “brujita” y alguien más hicieron su buena promesa y respectiva petición.
No recuerdo exactamente la calle por la que continuamos pero apenas a unos pasos nos encontramos con un floreado jardín con grandes árboles y cafés alrededor, donde bien ameritó  un breve descanso en buena sombra, Plaza de Mina, con refrescos algunos y una buena cerveza quien les está contando esta historia, disfrutamos de un hermoso paisaje con tres majestuosos FICUS, Jacarandas y una gran variedad de flores, en el lugar que debe su nombre a un miliciano de la independencia, Don Francisco Espoz y Mina y se localiza en el espacio que fue huerta y enfermería del convento de San Francisco.

 Continuando nuestro recorrido pasamos, y dejamos atrás, el museo de Cádiz y la Iglesia de San Francisco en la plaza del mismo nombre y pasando  el cruce de la avenida Beato Diego de Cádiz seguimos por la calle San Francisco, con más tiendas y movimiento hasta llegar a la Plaza e Iglesia de San Agustín,   final de ruta de lo conocido como “Cargadores a Indias” o casas de la burguesía gaditana con sus oficinas abajo, grandes patios interiores, habitaciones en plantas superiores y las ya mencionadas Torres vigías.
Hasta aquí llegó el grupo y las compras pudo más que seguir caminando así que seguimos solos Helena, Alicia y yo, porque sino, quien les cuenta ahora?...
A continuación las fotos de la llegada a Cadiz con las primeras impresiones caminando por el centro: